Jueves 10 de julio, temperatura ideal a las 00:00 horas, en los jardines de La Alcazaba árabe de Badajoz, la gran desconocida. Unas 4.000 personas nos reunimos para ver a LaMari de Chambao.
Algo más de 2 horas de concierto, de buen ambiente, rodeado de palmeras y de gente de todo tipo que canta, toca las palmas y se mueve al ritmo de LaMari.
Y algo más de horas escuchando a Inma, entre canción y canción, gritando "¡Lo bueno y lo malo!" y "¡esa Mari guapa!". Y, por fin, al final canta "Lo bueno y lo malo" acompañada por todos los que tuvimos la suerte de estar allí esa noche mágica.
Son las 3 de la mañana, estoy en casa y sigo cantando "Lo bueno y lo malo", pero es hora de dormir que mañana es viernes, hay que trabajar y uno ya no está para quitarle horas al sueño.
Algo más de 2 horas de concierto, de buen ambiente, rodeado de palmeras y de gente de todo tipo que canta, toca las palmas y se mueve al ritmo de LaMari.
Y algo más de horas escuchando a Inma, entre canción y canción, gritando "¡Lo bueno y lo malo!" y "¡esa Mari guapa!". Y, por fin, al final canta "Lo bueno y lo malo" acompañada por todos los que tuvimos la suerte de estar allí esa noche mágica.
Son las 3 de la mañana, estoy en casa y sigo cantando "Lo bueno y lo malo", pero es hora de dormir que mañana es viernes, hay que trabajar y uno ya no está para quitarle horas al sueño.
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